Enfermedades Arteriales
Enfermedad arterial Periférica
Probablemente estés familiarizado con los términos angina y ataque cardíaco, y sepas que están relacionados con un bloqueo del flujo sanguíneo al corazón. Ese mismo tipo de bloqueo puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo, privando a las extremidades (partes periféricas del cuerpo) de oxígeno y nutrientes. Si no se trata, la enfermedad podría llevar a la amputación.
Las arterias periféricas saludables son lisas y no tienen obstrucciones, permitiendo que la sangre suministre libremente oxígeno, glucosa y otros nutrientes a las piernas. A medida que envejecemos, las arterias periféricas acumulan placa, que es una sustancia pegajosa compuesta principalmente de grasa y colesterol. La placa estrecha el pasaje dentro de las arterias y hace que se vuelvan rígidas.
Un bloqueo moderado en una de las arterias de un gran músculo de la pierna, como la pantorrilla o el muslo, pueden causar dolor al caminar. El dolor puede mejorar temporalmente con descanso, pero regresará al caminar o con cualquier actividad.
Los proveedores médicos llaman claudicación al dolor en las extremidades inferiores, similar a la angina. El dolor en sí no es una amenaza para las extremidades, pero es una señal para que la persona cambie su estilo de vida y visite a un médico. Los tratamientos posibles incluyen: dejar de fumar, ejercicio diario y un control médico.
Diagnóstico
- Edad
- Género – los hombres son más propensos a lacondición que las mujeres.
- Hipertensión (presión arterial alta)
- Diabetes
- Fumar
- Colesterol alto
- Obesidad
- Falta de ejercicio
- Antecedentes familiares de problemas vasculares
Tratamiento
Dependiendo de la gravedad de tu condición, las opciones de tratamiento pueden incluir cambios en el estilo de vida, medicamentos, angioplastia/cirugía stent mínimamente invasiva o cirugía bypass abierta.
Isquemia Aguda en extremidades
La isquemia aguda es la supresión brusca del aporte sanguíneo a un determinado territorio como consecuencia de la obstrucción del flujo sanguíneo en una o más arterias.
Dentro de la isquemia aguda, se distinguen dos entidades: trombosis y embolia.
Es frecuente en pacientes con sintomatología previa de dolor en las extremidades, coincidiendo con la marcha (claudicación intermitente) y es mucho más frecuente en enfermos con factores de riesgo aterosclerótico; varones por encima de los 60-70 años con historia de hipertensión arterial, fumadores y con cifras elevadas de colesterol.
También es frecuente en pacientes con determinadas arritmias cardiacas y/o enfermedades de las válvulas del corazón, sobre todo estenosis mitral, así como en portadores de válvulas mecánicas.
Independientemente de la causa que la produzca la isquemia aguda es un cuadro de dolor de instauración súbita acompañado de frialdad y palidez. El dolor es muy intenso y no responde a los calmantes habituales.
Puede suceder en cualquier territorio pero lo más frecuente es que ocurra en las extremidades y, sobre todo, en las extremidades inferiores.
En cuadros muy evolucionados puede aparecer ausencia de pulso, falta de sensibilidad, parálisis e incluso gangrena franca.
Síntomas más habituales
- Dolor intenso.
- Frialdad.
- Palidez.